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La vida en las aulas y la animación a la lectura

petalo1Desde siempre he creído, y aún después de 20 años lo sigo haciendo, que la vida no puede salir del aula, porque la escuela debe prepararnos para ella. Las nuevas pedagogías, las emergentes, las que hacen quince o veinte años eras proyectos aislados y coordinados por algunos visionarios, hoy se convierten en paradigmas de lo que debemos o no hacer.

Siempre he criticado que la animación a la lectura se estaba desarrollando como un proceso aislado y la práctica me ha mostrado que el mejor proyecto de promoción lectora pasa por la mejor metodología posible y por el estilo docente. El cómo enseñamos a leer y a escribir, o el cómo abordamos los procesos de enseñanza de la escritura, etc., marca una referencia futura. Obviar todo esto: un error.

petalo2Las situaciones de aprendizajes proporcionan un entrenamiento, pero sobre todo, la posibilidad de manejar la información necesaria que provoque el conocimiento de un tema en concreto.

Dentro de poco se presenta un libro, «Pétalo 21», y en el evento van a participar alumnos y alumnas de Educación Infantil del Colegio de Los Salesianos de Las Palmas de Gran Canaria. Hasta aquí nada novedoso. Pero las tutoras decidieron aprovechar la oportunidad para no quedarse en la representación teatral esperada, sino que decidieron vivir el proceso con sus alumnos y alumnas de manera implícita: ¿Cómo nace un libro? ¿Qué es un libro? ¿Qué es un cuento? ¿Qué son los personajes? ¿Qué es un escritor? ¿Qué es una ilustradora? ¿Cómo se llaman los dibujos que aparecen en los libros? ¿Qué es un título? ¿Para qué sirven los títulos en los libros? Y así un sin fin de preguntas que han provocado en el alumnado una inquietud y curiosidad, no en este libro en concreto, sino en otros cualquiera. Se trata de entender porqué suceden las cosas y cómo; para aprender para qué sirven y cómo podemos utilizarlas para ser más felices. No es un proceso sencillo, pero si gratificante.

petalo3Las visitas programadas: narradores, escritora, ilustradora sirvieron para apuntalan todo el proyecto. La implicación de las familias y su participación en el desarrollo de las actividades, ha sido fundamental, porque refuerza el liderazgo del aula, sin contradicciones.

Los niños y las niñas conocieron el libro en folios, las ilustraciones al óleo, y luego conocerán el texto editado. Sus maestras han realizado sesiones de lectura en voz alta, actividades compartidas, han bailado, cantando; en definitiva, se conjugaron para que el alumnado viviera la lectura con la pasión que significa descubrir, en ocasiones, algo por primera vez.

Da igual como resulte la obra final. El objetivo está conseguido: despertar la ilusión por las historias que aparecen el los libros y valorar el esfuerzo que significa tener uno entre nuestras manos.

petalo4La pasión por la profesión y las ideas claras en los procesos metodológicos, son sinónimo de éxito docente, aunque implique que no lo veamos ahora: los maestros plantamos árboles sabiendo que nunca nos sentaremos en su sombra.

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